En que consiste
Es un esfuerzo interinstitucional derivado del Plan Estratégico 2030 para erradicar la pobreza extrema alimentaria y el desperdicio de alimentos en el estado, por medio de acciones coordinadas e innovadoras del Gobierno, la iniciativa privada, la sociedad civil organizada y la ciudadanía.
El hambre cero es una pieza clave
de la construcción de un futuro
mejor para todos.
El hambre extrema y la
malnutrición siguen siendo un
enorme obstáculo para el
desarrollo sostenible y
constituyen una trampa de la que
no es fácil escapar.
El hambre y la malnutrición hacen
que las personas sean menos
productivas y más propensas a
sufrir enfermedades, por lo que
no suelen ser capaces de
aumentar sus ingresos y mejorar
sus medios de vida. Hay casi
800 millones de personas que
padecen hambre en todo el
mundo, la gran mayoría en los
países en desarrollo.
¿Qué podemos hacer para ayudar?
Se pueden hacer cambios en la
vida cotidiana —en el hogar, en
el trabajo y en la comunidad—,
apoyando a los agricultores o a los
mercados locales y tomando
decisiones sostenibles sobre la
alimentación, apoyando la buena
nutrición para todos y luchando
contra el desperdicio de alimentos.
Reducción de Pérdidas y Desperdicio de Alimentos
Contribuir a la seguridad alimentaria y mejorar el estado de nutrición de la personas en pobreza y en condiciones de vulnerabilidad, a través de brindar ayuda y orientación alimentaria,evaluando periódicamente el avance en la disminución de la cadena alimentaria.
La pobreza y el hambre tienen un vínculo muy fuerte
Aunque se produce lo suficiente para alimentar a toda la población mundial, la pobreza y la vulnerabilidad que sufren muchas comunidades impide que tengan acceso a una alimentación sana – bajas producciones, mercados defectuosos o precios inaccesibles -. Así, África Oriental y África Central sufren los mayores ratios de hambre, llegando a superar el 30% de la población en muchos países.
Países donde una importante parte de la población no puede llegar a consumir 2.100Kcal al día, las personas no pueden desarrollar una vida activa y sana. Los adultos no tienen la energía suficiente para trabajar, los niños no pueden estudiar, ni jugar y el embarazo supone un riesgo para las madres.
Desnutrición
La desnutrición tiene un papel muy importante en el tema de Cero Hambre ya que se da mayormente en los niños y adolescentes pero existen algunas formas de prevenirlas:- Lograr una buena alimentación variada y nutritiva que se base en: cereales y tubérculos , verduras y frutas de temporada, leguminosas, alimentos de origen animal (pollo, huevo, pescado, carne, leche o queso).
- Una mujer se debe preparar para cuando sea madre, acumulando reservas de micronutrientes y alimentarse bien.
- Si una mujer esta embarazada: necesita tres comidas principales y dos entre-comidas, variando los alimentos de buena calidad.
- Los niños menores de 6 meses deben ser alimentados solo con leche materna.
- Vigilar la talla y peso del niño es una forma de monitorear su crecimiento.
- Preparar los alimentos con limpieza, lavar las manos antes de preparar la comida o servirla y luego de ir al baño o cambiar el pañal puede evitar que el infante se enferme.
- Los niños enfermos deben continuar su alimentación, sin grasas, mucho líquido y muchos cuidados. Luego de la enfermedad los niños recuperan su peso con una buena alimentación.
- Es muy importante acudir regularmente a un centro de salud durante el embarazo, y controlar regularmente al niño con un pediatra y un nutricionista, para evitar complicaciones, problemas de salud y prevenir la desnutrición.
- Tener una buena salud alimentaria con alimentos balanceados.
Fuentes de consulta
https://www.hambreceronl.mx/
https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/wp-content/uploads/sites/3/2016/10/2_Spanish_Why_it_Matters.pdf
https://es.wikipedia.org/wiki/Desnutrici%C3%B3n#Prevenciones